sábado, 5 de mayo de 2007

A un mes del asesinato de Carlos Fuentealba

De la Sota y Sobisch reunidos en el 2006... Dime con quien andas y te diré quien eres

Pareciera que fue ayer, pero fue hace un mes exacto.
Pareciera que fue hace un siglo, pero es la

impunidad que nos sigue marcando.

A un mes del asesinato de Carlos Fuentealba los cordobeses y los argentinos no olvidamos (no debemos olvidar). En especial porque en estos treinta días hemos sido testigos de una obra de terror y mentiras.

Hemos asistido a la repetición de una película del pasado y así vimos como se detenía al oficial que disparó contra Fuentealba para enterarnos inmediatamente que antes del homicidio ya tenía una condena pero seguía en servicio activo. Después, con el correr de las semanas, supimos que su regimen de detención era laxo y que probablemente gozaba de salidas y privilegios. Una vez más quedaba claro que no había casualidades, ni errores, ni excesos.

También vimos como Sobisch quiso utilizar su evidente mano dura como bandera de campaña y, mientras miles de argentinos marchábamos por las calles de nuestro país exigiendo justicia, el gobernador neuquino pretendía ciementar su imagen sobre los gases, las balas de goma y la muerte de un docente.

Hoy, a un mes de este crimen, nos comprometemos para que la vieja Argentina neoliberal, de los privilegios y la represión termine de una vez y para siempre, sepultada por la voluntad popular y la memoria colectiva.

Hoy, después del "despliegue de tanta maldad insolente", seguimos exigiendo la renuncia de Sobisch y el castigo para toda la cadena de mandos que participó en el brutal asesinato de Carlos Fuentealba.

PRENSA MILITANCIA K del FRENTE NUEVO